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| Fuente de las imágenes: Web Colegio La Milagrosa de Espinardo |
El colegio La Milagrosa de Espinardo realizó esta semana diversas actividades en honor a la fundadora de las Hijas de la Caridad, Santa Luisa de Marillac.
Eucaristía por la fundadora, plantación de flores y realización de murales fueron las actividades llevadas a cabo por el centro educativo para dar a conocer las distintas facetas de Santa Luisa así como su dedicación a los más necesitados.
Luisa de Marillac nació en París en 1591 y falleció el 15 de marzo de 1660. Fue la co-fundadora, con San Vicente de Paúl, de las Hijas de la Caridad (29 de noviembre de 1633), congregación dedicada al carácter asistencial. Reformó en la Francia de esta época la atención que se realizaba en hospitales, orfanatos, asilos, hogares de adopción e instituciones psiquiátricas, entre otros centros.
A pesar de su delicado estado de salud y de los diversos "golpes personales" que le dio la vida, Luisa de Marillac era una mujer decidida, valiente y muy inteligente. En su biografía destaca la gran humildad hacia los demás ya que, mientras ella trabajaba con la sociedad más humilde, los nobles de su familia luchaban por conseguir el poder y gobernar en Francia. Sus biógrafos dicen que recorría el país visitando las asociaciones de caridad y que llevaba siempre gran cantidad de ropa y medicina para regalar. Casi todo lo compraba con dinero que ella, por sus propios esfuerzos, había conseguido.
En sus últimos días, antes de su fallecimiento, Santa Luisa de Marillac dijo a sus hermanas lo siguientes: "Sed empeñosas en el servicio de los pobres... amad a los pobres, honradlos, hijas mías y honraréis al mismo Cristo".
Las Hermanas de la Caridad recibieron el premio "Príncipe de Asturias de la Concordia 2005", otorgado por la Familia Real.
